Nota de Opinión: Cacerolas, paro y elecciones. Por Andrea García (*)

No alcanzarán ni los fuertes ruidos de las cacerolas ni la reedición de los piquetes para acallar las voces que sumaremos a partir del 7D. Será, tal vez, la modalidad a la que estaremos sometidos los argentinos de acá hasta las elecciones de 2013. No se puede pensar seriamente que Gerónimo Venegas reclame la elevación del mínimo no imponible cuando ningún trabajador del sector que representa percibe más que el salario mínimo. No es serio observar a la Sociedad Rural y a la Federación Agraria, hermanadas y abrazadas, acompañando un reclamo en el que ellos son la patronal y no registra a sus trabajadores, les paga el sueldo mínimo, en el mejor de los casos, y proponen permanentemente el desfinanciamiento del Estado. Es lamentable ver a Hugo Moyano, uno de los representantes del movimiento obrero, unido a quienes siempre atentan contra los intereses de los trabajadores y siendo funcional a quienes han construido su poder monopolizando la palabra para generar una opinión pública vacía...