Atenas derrotó a Argentino de Junín
Esperado retorno de Fabricio Oberto a Atenas. Es que la presentación del ex NBA obró, qué duda cabe, como una bisagra para el Griego. Pero no porque su aporte haya sido deslumbrante en la cancha, una deuda que deberá saldar en los próximos compromisos, sino porque su sola presencia fue un disparador anímico para el cómodo triunfo ante Argentino de Junín 82-59 que, de paso, viene a cortar una serie de tres derrotas consecutivas.
Para empezar, podría decirse que el equipo se despachó con una de sus mejores actuaciones y sobreponiéndose al “cambio de planes” que significó asimilar el protagonismo de una noche que estaba reservada a intentar lucir a su estelar y flamante refuerzo.
Oberto, impecalbe físicamente, justificó con creces aquel pedido de paciencia al que había hecho referencia cuando asumió el compromiso de volver a ponerse la “7” verde. Evidenció su falta de ritmo de competencia (no jugaba oficialmente desde el Preolímpico de Mar del Plata en agosto de 2011) y su aporte en el juego fue más voluntarioso que efectivo: 2 puntos, producto de un par de libres en el último cuarto, previos a una inesperada salida, cuando se fue al banco con un corte en la cabeza tras una caída.
“Tengo que conocer la Liga de nuevo. Pero fue muy buena la sensación de estar en la cancha y ahora sé donde estoy y lo que se viene. Lo importante fue el triunfo. Tengo clarísimo lo fuerte que se juega y que los otros equipos también se van a motivar”, dijo tras una planilla que mostró poco: 2 puntos (1/1 en libres, 0/5 en dobles), un rebote (festejado por el público como si fuera una conversión), dos asistencias y dos pérdidas.
El golpe anímico
Lo del público, colmando el Poli varios minutos antes del inicio y rememorando tiempos idos, era de esperarse y lejos estaría de sorprender. Sin dudas que la novedad fue el impacto anímico que potenció la llegada de Oberto. En la gente, que volvió a entusiasmarse dejando la apatía que mostró en casi toda esta Liga, y hasta en el equipo de Alejandro Lotterio, que tuvo pasajes de muy buen funcionamiento para llegar a una victoria por demás merecida.
Oberto está de regreso y el básquet argentino está feliz. Lo mejor, se supone, está por venir. Será con paciencia.
Equipos:
Atenas: Bruno Lábaque 5, Matías Lescano 19, Javier Bulfoni 11, Fabricio Oberto 2, Djibril Kanté 13, Mariano Fierro 5, Diego Guaita 4, Bruno Colli 0, Alexis Elsener 17, Franco Barroso 6, Nicolás Zurschmitten 0, Tomás Ligorria 0. DT: A. Lotterio
Argentino (J): N. De los Santos 8, Fernando Funes 5, Juan Cangelosi 1, Axel Weigand 7, Cristian Amicucci 12, Gastón Lucchino 7, Kavon Lytch 8, Brian Carlwell 8, Agustín Carabajal 3, Andrés Miguel 0, Martín Delgado 0. DT: Adrián Capelli
Salió por 5 faltas: Fernando Funes (AJ).
Parciales: 1º cuarto, Atenas 21-Argentino 14; 2º: 43-23 (22-9); 3º, 59-40 (16-17) y 4º, 82-59 (23-19).
Árbitros: Roberto Smith y Osvaldo Bautista.
Cancha: Polideportivo Carlos Carlos Cerutti.
(Fuente: La Voz de Córdoba. Mundo D)
