Se entregó el único imputado por el asesinato de Angélica Inés Gómez


El changarín Roque José Ibáñez se mantenía prófugo de la justicia desde antes de la aparición del cuerpo. Ayer se presentó en la Ayudantía Fiscal de Rojas y quedó alojado en la UP 49 de Junín.

Roque José Ibáñez, alias Camerún, se entregó hoy a las 11 de la mañana en la Ayudantía Fiscal de Rojas. El hombre, de 56 años, es el único imputado por el homicidio de Angélica Inés Gómez, la joven  madre de 26 años, cuyo cuerpo apareció hace algunos días en un camino rural de la localidad de Rafael Obligado. El changarín quedó alojado en la Unidad Penal Nº 49 y hoy se presentará ante el fiscal de la causa, Sergio Terrón.
Sobre Ibáñez pesaba un pedido de captura dictado por el Juez José Lucchini, del Juzgado de Garantías Nº 1. El hombre había desaparecido semanas atrás, cuando los investigadores del caso Gómez (en ese momento todavía desaparecida) empezaban a rastrillar distintas zonas rurales de Rojas, ya que la principal sospecha era que la mujer había sido asesinada.
Con el hallazgo del cuerpo los pesquisas apuntaron sus sospechas hacía el changarín, oriundo de Chacabuco, por quien ya había una denuncia de “averiguación de paradero”, ya que este había sido la última persona que la había visto con vida.
A Ibáñez se le imputa el delito de “homicidio agravado, por ser la víctima una mujer, cuando el hecho sea cometido por un hombre y mediare violencia de género, en los términos del artículo 80, inc. 11 del Código Penal”.
Se espera que hoy el hombre preste declaración indagatoria ante el fiscal del caso, el doctor Sergio Terrón. El titular de la UFIJ Nº 5 fue quien llevó desde un primer momento el caso. Con el correr de los días, después de denunciada la desaparición de la mujer el 9 de febrero (estaba desaparecida desde el 30 de enero), el caso empezó a virar. Hasta se sospecho que Gómez podría haber sido victima de una red de trata de personas, pero la ausencia premeditada de Ibáñez de los lugares a los que frecuentaba y la  aparición de la moto en la que supuestamente se había ido la mujer, en Junín, generaron que la hipótesis más fuerte sea la del homicidio.
El cuerpo de Gómez fue encontrado en un camino rural en la localidad de Rafael Obligado. Los investigadores del caso llegaron a ese lugar gracias al aporte de un testigo quien, tras la desaparición de Ibáñez de los lugares a los que frecuentaba, decidió contar a la policía lo que sabía.
La mujer estaba semi-enterrada, en posición fetal, con ramas, restos de gomas y cal, cerca del conocido “camino viejo” a Rafael Obligado. El cuerpo presentaba un avanzado estado de descomposición, por lo que su remoción del lugar demandó más de un día. El propio fiscal de la causa, Sergio Terrón, dijo que se realizó un trabajo “casi arqueológico”.

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