Viajes internacionales: tras los primeros cimbronazos del cepo cambiario, el turismo va retornando a los niveles óptimos
Los argentinos vuelven a optar por el país y en materia de
preferencias, tras el accidente del Costa Concordia en Italia, el mercado de
los cruceros vuelve a tener demanda con vistas a este año y 2014.
Luego de atravesar un período de incertidumbre por la
decisión oficial de restringir al mínimo la compra y venta de moneda
extranjera, las agencias de viajes parecen haber recuperado la sonrisa en los
últimos meses, una vez que se disiparon las dudas de los clientes y comenzó la
venta de pasajes y paquetes turísticos al exterior para la temporada de verano
2012/2013.
Es que, al contrario de lo que podría suponerse, el cepo
cambiario prácticamente no afectó la demanda, en comparación con la cantidad de
pasajes emitidos, por ejemplo, durante el verano anterior.
Incluso, algunos conjeturaron que las facilidades en cuotas
pesificadas sin interés, más la cotización del denominado "dólar
turístico" -cercano a los 4,90 pesos- y los elevados precios que se
registran en los alquileres de los principales destinos nacionales confluyeron
para que muchos optaran por pasar este nuevo período de vacaciones fuera de las
fronteras del país.
“Fue un año especial que tuvo sus vaivenes por una cuestión externa
al turismo”, no dudó en calificar Matías de Lucca (Finisterre Viajes) agregando
que “el ritmo de la demanda turística fue variando durante el año. Pasada la mitad
de 2012 se notó un cierto “bajón” y con el correr de los meses fue tomando el
nivel que venía teniendo desde 2011, más que nada porque la gente se fue
acostumbrado y se va recuperando, de a poco un buen nivel”.
En diálogo con LA VERDAD, al ser consultado sobre cómo se
desenvuelve la operatoria turística, indicó que “los productos turísticos que
el pasajero compra en Junín o en cualquier ciudad de la Argentina, los pagan en
pesos al cambio oficial. La moneda extranjera la necesitan cuando se van de
viaje a un país limítrofe o cualquier nación del mundo. Cuando compran esa
divisa, todos tenemos un límite de compra oficial que se sabe siete días antes
de la salida, tras un pequeño trámite que debe realizarse en oficinas de la
AFIP”.
Esos límites varían de acuerdo a la extensión de la estadía,
el destino, entre otros parámetros y cuando se le preguntó a de Lucca sobre si
los límites no generaban ciertas complicaciones en el lugar de destino a la
hora de desplazarse y realizar actividades, respondió que “el argentino se
termina habituando, es fácilmente adaptable a las nuevas situaciones. Lleva un
poco de efectivo, lleva tarjetas a las que se les recarga el 15% pero luego
tiene una devolución en el Impuesto a las Ganancias”.
Sobre cómo fueron tomadas estas medidas en los destinos,
comentó que “seguramente no lo vieron con buenos ojos porque divisaron la pérdida
de demanda. Además, muchos turistas, por ejemplo, compraban en forma directa en
el sur de Brasil o alquilaban un departamento y actualmente no se puede hacer o
existen muchos impedimentos. Debieron cambiar ciertos hábitos y regularizar
otros, por ejemplo, el régimen de facturación en otros países es distinto al
nuestro y estas medidas obligó a efectuar cierto ordenamiento, aún no estando
en Argentina”.
La demanda 2013
Con estas medidas fueron apareciendo nuevos matices que en
otras temporadas no existían. Si bien se mantuvieron demandas clásicas como Brasil
o la costa atlántica, muchos argentinos optaron por veranear en el país.
Matías de Lucca comentó que “se comenzó a trabajar en el exterior
con compras a largo plazo, pautando viajes a seis u ocho meses”.
Y también la gente está retornando a los cruceros, segmento retraído
por el accidente del Costa Concordia en Italia, pero meses después se vuelve a
ver que para 2013-2014 está retornando el interés.
“Los patrones de compra –hizo notar- han variado, pero no lo
veo como algo negativo, porque a todos nos permite organizarnos con tiempo,
tanto a compradores como vendedores. A la larga, son buenas variantes las que
se fueron introduciendo. Aparenta un año un poco más estable que en el 2012”.
Van apareciendo nuevos destinos como el norte argentino –Salta
o Jujuy-, crece el interés por la región cuyana, Puerto Madryn, Perú con el
Dakar, el sur argentino –Calafate con gran potencial- vuelve a ser mirado como
un destino de mayor interés. “Comienzan a darse variantes y aparecer destinos
que no estaban dentro de la agenda de un argentino común, que eran para el
turismo internacional”, mencionó.
Brasil y Uruguay se siguen manteniendo en el horizonte de
los destinos argentinos y Chile está comenzando a tener un poco más de demanda.
Las reservas se pueden hacer en cuotas, en efectivo o
tarjeta de créditos de acuerdo a las promociones bancarias. “El argentino no
deja de salir de vacaciones, a lo sumo varia el mes del año o el destino de
acuerdo al bolsillo, pero el hábito de vacaciones está instaurado”, reflexionó.
Vacaciones, un hábito para una buena calidad de vida
Las vacaciones ya forman parte prácticamente de los hábitos
y las necesidades de los argentinos para una buena calidad de vida y así, al
igual que otros gastos familiares como la televisión, estudios, internet, etc.,
ocupan un espacio que comienza a ser ineludible y necesario.
“Dentro de la economía hogareña es un segmento que mantiene cierta estabilidad”,
destacó Matías de Lucca durante el diálogo con este diario mencionando que “se trata
de un ítem de confort que forma parte de la vida diaria y pasa a ser un elemento
de cierta necesidad porque uno vive dentro de una vorágine de consumo de energía
y pasa a ser una cuestión de necesidad de salud y bienestar”.