Disimil panorama agropecuario bonaerense: entre inudaciones y sequías
Sociedad Rural, CRA, Coninagro y Federación Agraria quieren discutir la emergencia. Hay zonas con exceso de agua y otras con falta de lluvias.
La Mesa de Enlace reclamó ayer la urgente convocatoria a la Comisión Nacional de Emergencia Agropecuaria para analizar la difícil situación que viven los productores afectados por las inundaciones o las sequías que afectan a amplias zonas del país.
"Durante los últimos años hubo una enorme transferencia de recursos del sector productivo al Estado, pero, lamentablemente, no se realizaron las obras necesarias para mitigar las consecuencias de las adversidades climáticas", señaló la entidad, mediante un comunicado.
También solicitó a los gobiernos nacional, provinciales y municipales que aceleren los trámites para declarar la emergencia en las zonas correspondientes y lleguen a los productores afectados con una ayuda concreta y efectiva que permita financiar las pérdidas de la actual campaña y capital de trabajo para la próxima.
El reclamo fue consensuado tras una cumbre dirigencial en la sede de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA). "El gobierno pretende desviar la discusión sobre si las hectáreas perjudicadas son cuatro, seis o diez millones. Nosotros necesitamos respuestas rápidas", manifestó el titular de la entidad anfitriona, Rubén Ferrero.
Al describir el acuciante panorama, dijo que el centro y el norte bonaerenses, junto al sur santafesino, sufren anegamientos e inundaciones. El norte de la provincia litoraleña y Chaco, mientras tanto, aún soportan sequía.
Junto a Ferrero, estuvieron Carlos Garetto y Daniel Assef (Coninagro), Luis Etchevehere y Daniel Pelegrina (Sociedad Rural) y Julio Currás con Guillermo Gianassi (Federación Agraria Argentina).
Finalizado el encuentro, el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, decidió concurrir a la sede de Coninagro y entrevistarse con Garetto para interiorizarse sobre su visión del tema.
"Faltan obras que morigeren el efecto de los desastres climáticos", lamentó Etchevehere.
"Todos los niveles del gobierno deberían responder en forma rápida ante esta grave situación. Con el dinero perdido por las inundaciones se podrían haber finalizado las obras del plan maestro del río Salado", amplió.
El mal tiempo y las subas de impuestos en Buenos Aires, Entre Ríos y Santa Fe conforman un cóctel, según Ferrero, donde la rentabilidad de los productores --tanto en la Pampa Húmeda como en las economías regionales-- mermó muchísimo.
La Mesa de Enlace reclamó ayer la urgente convocatoria a la Comisión Nacional de Emergencia Agropecuaria para analizar la difícil situación que viven los productores afectados por las inundaciones o las sequías que afectan a amplias zonas del país.
"Durante los últimos años hubo una enorme transferencia de recursos del sector productivo al Estado, pero, lamentablemente, no se realizaron las obras necesarias para mitigar las consecuencias de las adversidades climáticas", señaló la entidad, mediante un comunicado.
También solicitó a los gobiernos nacional, provinciales y municipales que aceleren los trámites para declarar la emergencia en las zonas correspondientes y lleguen a los productores afectados con una ayuda concreta y efectiva que permita financiar las pérdidas de la actual campaña y capital de trabajo para la próxima.
El reclamo fue consensuado tras una cumbre dirigencial en la sede de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA). "El gobierno pretende desviar la discusión sobre si las hectáreas perjudicadas son cuatro, seis o diez millones. Nosotros necesitamos respuestas rápidas", manifestó el titular de la entidad anfitriona, Rubén Ferrero.
Al describir el acuciante panorama, dijo que el centro y el norte bonaerenses, junto al sur santafesino, sufren anegamientos e inundaciones. El norte de la provincia litoraleña y Chaco, mientras tanto, aún soportan sequía.
Junto a Ferrero, estuvieron Carlos Garetto y Daniel Assef (Coninagro), Luis Etchevehere y Daniel Pelegrina (Sociedad Rural) y Julio Currás con Guillermo Gianassi (Federación Agraria Argentina).
Finalizado el encuentro, el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, decidió concurrir a la sede de Coninagro y entrevistarse con Garetto para interiorizarse sobre su visión del tema.
"Faltan obras que morigeren el efecto de los desastres climáticos", lamentó Etchevehere.
"Todos los niveles del gobierno deberían responder en forma rápida ante esta grave situación. Con el dinero perdido por las inundaciones se podrían haber finalizado las obras del plan maestro del río Salado", amplió.
El mal tiempo y las subas de impuestos en Buenos Aires, Entre Ríos y Santa Fe conforman un cóctel, según Ferrero, donde la rentabilidad de los productores --tanto en la Pampa Húmeda como en las economías regionales-- mermó muchísimo.